miércoles, 13 de julio de 2016

DIAGNOSTICO Y TRATAMIENTO DE DISARTRIA

Disartria: diagnóstico

 

Su dificultad para hablar puede ser evaluada por un patólogo del habla y lenguaje para diagnosticar el tipo de disartria se pueden presentar. Esto puede ser útil para el neurólogo que será el responsable de encontrar la causa subyacente.
Junto con una revisión de la historia clínica y un examen físico completo, las pruebas y los procedimientos utilizados para investigar las posibles causas subyacentes incluyen:
  • Pruebas de imagen. Las pruebas de imagen, tales como una tomografía computarizada (TC) o resonancia magnética (IRM), se pueden utilizar para crear imágenes de su cerebro, cabeza y cuello que pueden ayudar a identificar la causa de un problema del habla.
  • Estudios del cerebro y los nervios. Un electroencefalograma (EEG) puede ser usado para medir la actividad eléctrica en el cerebro. Un electromiograma (EMG) puede evaluar la actividad eléctrica de los nervios que transmiten mensajes a los músculos. Estudios de conducción nerviosa puede medir la fuerza y ​​la velocidad de las señales eléctricas que viajan a través de los nervios a los músculos. Estas pruebas pueden ayudar a identificar la fuente de sus síntomas y le puede ayudar en el diagnóstico de la causa subyacente.
  • Pruebas de sangre y orina. Análisis de sangre y orina pueden ayudar a determinar si una enfermedad infecciosa o inflamatoria puede ser la causa de sus síntomas.
  • Punción lumbar (punción espinal). En este procedimiento, un médico o enfermera extrae una pequeña muestra de líquido cefalorraquídeo dentro de su canal espinal para análisis de laboratorio. Una punción lumbar puede ayudar a diagnosticar infecciones graves, trastornos del sistema nervioso central, tales como el síndrome de Guillain - Barré y la esclerosis múltiple y el cáncer de cerebro o la médula espinal.
  • Biopsia cerebral. Si un tumor cerebral se sospecha, su médico puede tomar una pequeña muestra de su tejido cerebral para ser analizada en el laboratorio.
  • Pruebas neuropsicológicas. Este grupo de pruebas mide la función cognitiva y evalúa su lenguaje intelectual y las habilidades espaciales, así como la memoria, el razonamiento y el juicio. En muchos casos, estas habilidades cognitivas no están afectadas por disartria. A pesar de la disartria hace hablar a las personas difíciles, muchos con este trastorno no tienen problemas para entender el habla, el lenguaje escrito y la comunicación no verbal.


tratamiento   Disartria

 

Usted posiblemente necesite que lo remitan a un logopeda y terapeuta del lenguaje para que le realicen pruebas y tratamiento. Las habilidades especiales que usted puede aprender abarcan:
  • Técnicas de masticación o deglución seguras, de ser necesario.
  • Evitar conversaciones cuando esté cansado.
  • Repetir los sonidos una y otra vez de manera que pueda aprender los movimientos de la boca.
  • Hablar lentamente, usar una voz más fuerte y hacer pausas para verificar que los demás le entiendan.
  • Qué hacer cuando usted se siente frustrado mientras habla.
Puede usar muchos dispositivos o técnicas diferentes para ayudar con el lenguaje, tales como:
  • Computadoras para digitar palabras.
  • Tarjetas de doble cara con palabras o símbolos.
  • Programas de computadora especiales que le permiten crear palabras habladas escribiéndolas o haciendo clic en los símbolos.
La cirugía puede ayudar a las personas con disartria.



miércoles, 6 de julio de 2016

SIGNOS DE LA DISARTRIA Y ALGUNAS COMPLICACIONES

SINTOMAS
Una persona con disartria puede experimentar alguno de los siguientes síntomas, dependiendo de la extensión y localización del daño al sistema nervioso:
  • Dificultad para hablar
  • Ritmo lento del habla
  • Incapacidad para hablar más fuerte que un susurro
  • Tasa rápida de discurso que es difícil de entender (taquilalia)
  • Voz tensa, nasal, áspera
  • Ritmo irregular o anormal de expresión (disritmia)
  • Volumen desigual de expresión
  • Discurso monótono
  • Dificultad para mover la lengua o los músculos faciales
  • Babeo (sialorrea)
  • Dificultad para masticar y tragar (disfagia)
Debido a que la disartria puede ser signo de un problema subyacente grave, consulte a su médico si experimenta cambios súbitos e inexplicables en su capacidad de hablar claramente. 

La disartria puede conducir a un número de complicaciones, incluyendo:
  • Problemas de comunicación. La disartria puede hacer que sea difícil para los demás entenderle cuando habla, la disminución de su capacidad para comunicarse eficazmente.
  • Dificultades sociales. Los problemas de comunicación causados ​​por disartria puede afectar sus relaciones con familiares y amigos y puede hacer que las situaciones sociales difíciles.
  • Depresión. En algunas personas, la disartria puede llevar al aislamiento social y depresión. 


  

CLASIFICACIÓN DE LA DISARTRIA

Las lesiones producidas en el SNC pueden localizarse en distintos puntos, en función de los cuales estableceremos diferentes tipos de disartrias. Así, podemos diferenciar:
1. DISARTRIA FLÁCIDA:
En este caso la lesión está localizada en la neurona motriz inferior. Como notas descriptivas de esta disartria tendríamos: 
  • Alteración del movimiento voluntario, automático y reflejo. 
  • Flacidez y parálisis con disminución de reflejos musculares. 
  • Atrofia de las fibras musculares. 
  • Debilidad o fatiga durante el ejercicio (sobre todo en la musculatura ocular, bulbar, del cuello y de la cintura escapular). 
  • Posible afectación de la musculatura respiratoria. 
  • Afectación de la lengua. 
  • Afectación de los movimientos del paladar. 
  • Disminución del reflejo de náuseas. 
  • Deglución dificultosa.
  • Debilidad de las cuerdas vocales, paladar y laringe.
  • Alteraciones respiratorias (rápida y superficial). 
  • Voz ronca y poco intensa. 
  • Hipernasalidad. 
  • Articulación consonántica distorsionada. 
2. DISARTRIA ESPÁSTICA:
La afectación se produce a nivel de la neurona motriz superior; son características de esta afectación: 
  • Debilidad y espasticidad en un lado del cuerpo, en los músculos distales de las extremidades, la lengua y los labios. 
  • Resistencia al movimiento pasivo de un grupo muscular. 
  • Los reflejos de estiramiento muscular están exagerados. 
  • Presencia de reflejos patológicos. 
  • La respiración y la fonación no suelen afectarse.
  •  Disfunción articulatoria. 
  •  Se asocia a otras patologías (encefalitis, esclerosis múltiple, traumatismos craneales).
  • No hay atrofia de fibras musculares. 
  •  Frecuente alteración del control emocional. 
  •  Emisión de frases cortas.
  •  Voz ronca. 
  •  Tono bajo y monótono. 
  • Lentitud en el habla. 
  • En ocasiones se producen interrupciones tonales o de la respiración. 
  •  La articulación consonántica suele ser poco precisa y, a veces, se producen distorsiones vocálicas. 
3. DISARTRIA ATÁXICA:
La afectación del cerebelo ocasiona una disartria atáxica. Es a partir de lesiones cerebelosas cuando se deduce que este órgano regula la fuerza, velocidad, duración y dirección de los movimientos ocasionados en otros sistemas motores. En general, la afectación del habla ocurre simultánea a lesiones cerebelosas bilaterales o generalizadas (Bagunyá y Sangorrín, 1988). Como descripción de los trastornos cerebelosos señalamos: 
  • Hipotonía de los músculos afectados. 
  •  La dirección, duración e intensidad de movimientos son lentos e inapropiados en la fuerza. 
  •  Posible irregularidad de los movimientos oculares. 
  • Disfunción faríngea caracterizada por una voz áspera y una monotonía en el tono con escasas variaciones en la intensidad.
  • Disfunciones articulatorias mediante distorsiones. 
  • Alteraciones prosódicas por énfasis en determinadas sílabas. 
4. DISARTRIAS POR LESIONES EN EL SISTEMA EXTRAPIRAMIDAL: 
El sistema motor extrapiramidal es parte del paleoencéfalo (junto con el diencéfalo y el tálamo óptico), destacando entre sus funciones las siguientes: 
  • Regulación del tono muscular en reposo y de los músculos antagónicos cuando hay movimiento. 
  • Regulación de los movimientos automáticos. 
  • Adecuación entre la mímica facial y las sincinesias ópticas. 
Las lesiones en el sistema extrapiramidal pueden ocasionar dos tipos de disartrias: 
4.1. Hipocinéticas: Muy característica en la enfermedad de Parkinson, presenta los siguientes rasgos: 
  • Movimientos lentos, limitados y rígidos. 
  • Movimientos repetitivos en los músculos del habla.
  • Voz débil, articulación defectuosa, falta de inflexión. 
  • Frases cortas. 
  • Falta de flexibilidad y control de los centros faríngeos.
  • Monotonía tonal. 
  • Variabilidad en el ritmo articulatorio.